¿Qué Es La Dentina? 5 Consejos Para Su Cuidado

¿Qué es la dentina? ¿Qué función cumple? ¿Qué relación tiene con la sensibilidad dental? ¿Cómo cuidarla? Estas son algunas de las preguntas que se responden a este relato.

Una de las partes que requiere mayor cuidado para tener una buena salud oral no es visible, aunque si influye en el color de los dientes. Esta es la dentina, una de las capas de la estructura dental de la que poco se conoce, aunque tiene una función relevante en la salud oral.

¿Qué es la dentina?

1. La dentina es un tejido calcificado que se encuentra debajo del esmalte del diente y representa la mayor parte del tejido dental.

2. La dentina se encuentra debajo del esmalte dental. Es la segunda capa de la estructura del diente. Es decir, está entre el esmalte y la pulpa dentaria.

3. Una característica importante de la dentina es que su producción es constante durante toda la vida y se regenera, reduciendo el impacto del desgaste o deterioro.

4. Esta segunda capa de la estructura dental se forma a partir de la dentinogénesis, proceso en el que los odontoplastos (células especializadas en la producción de dentina) producen la predentina, sustancia que posteriormente madura a la dentina.

5. La dentina está en la corona del diente, cubierta por el esmalte y en su interior están los túbulos dentinarios, canales que van desde el esmalte hasta la pulpa y transmiten sensaciones de calor, frío, estímulos de alimentos ácidos o dulces a la parte interna del diente. En la zona de la raíz, la dentina está cubierta por el cemento dental.

Función de la dentina

La dentina brinda soporte al esmalte y protege la pulpa. Además, transmite los impulsos (sensaciones / estímulos) desde el esmalte o la raíz hasta la pulpa dental, conformada por un conjunto de vasos sanguíneos y nervios.

La dentina es la capa que da color al diente y brinda protección contra la caries.

Composición y características de la dentina

La dentina es menos traslúcida que el esmalte porque tiene menor grado de mineralización, factor por el cual, la dentina determina el color del diente.

Muestra un color blanco con tonalidad amarilla, aspecto que presenta variaciones según el grado de mineralización, la vitalidad de la pulpa y la edad de la persona.

Tipos de dentina

Según la ubicación en la estructura del diente, se tienen tres tipos de dentina:

1. En la parte más externa está la dentina primaria (predentina). Se encuentra en contacto con el esmalte y establece la delimitación de la pieza dental con la cámara pulpar.

2. La dentina secundaria está en la raíz, en contacto con el cemento. Su formación no disminuye a lo largo del ciclo vital del diente. También se le conoce como ortodentina o dentina regular.

3. La dentina terciaria, también llamada dentina reparadora, se forma internamente y su función es aislar la pulpa de alguna lesión bucal, tal como una caries dental y el desgaste dental.

¿Qué cuidados debe tener la dentina para estar sana?

Para el cuidado de la buena condición de la dentina se recomienda:

1. Cepillado dental después de cada comida. Se sugiere utilizar un cepillo de cerdas suaves y no aplicar demasiada fuerza, pues esto puede afectar el esmalte dental. Se recomienda hacer movimientos circulares.

2. El uso del hilo dental y un enjuague bucal contribuyen a la higiene, y son un buen complemento del cepillado.

3. Limpiar bien los espacios interdentales y la línea de las encías.

4. Usar una pasta dental con flúor.

5. No usar los dientes como herramienta para manipular objetos, tal como trozar cintas adhesivas o destapar recipientes. Esto desgasta el esmalte y genera fisuras que afectan a la dentina.

¿Qué provoca la sensibilidad dental?

La dentina tiene una capa de tejido que está vinculada con el nervio del diente. Cuando hay retracción de las encías, la dentina queda expuesta, dando paso a la sensibilidad dental, circunstancia frecuente que provoca molestia al consumir alimentos / bebidas muy fríos o demasiado calientes, pues al entrar en contacto con la dentina se estimula el nervio dental y se presenta a reacción.

Los daños en el esmalte dental pueden dejar la dentina expuesta. Es el caso de la caries dental, que afecta primero el esmalte y luego avanza a la dentina, causando dolor.

Si la caries no recibe tratamiento, destruye la dentina y puede avanzar hacia la pulpa, el hueso y la encía.

Generalmente, la sensibilidad dental es una manifestación del desgaste del esmalte del diente o de la exposición de las raíces. En algunas ocasiones, el malestar es consecuencia de un diente agrietado o astillado, un empaste que requiere ser renovado o por una enfermedad de las encías.

Estas son algunas de las situaciones que provocan la sensibilidad dental:

• Bruxismo. Esto afecta el esmalte y la dentina.

• Caries no tratadas oportunamente.

• Enfermedades periodontales que provocan la retracción gingival.

• Una dieta con abundantes productos ricos en azúcar, ácidos o alimentos picantes.

• Uso de un cepillo con cerdas muy rígidas o un cepillado muy fuerte.

• Después de un proceso de blanqueamiento dental, se presenta sensibilidad durante algunos días.

¿Cuál es el tratamiento para la sensibilidad dental?

Para solucionar la molestia que trae la sensibilidad dental, lo indicado es consultar con el odontólogo para que haga una valoración y prescribir el tratamiento a seguir.

Algunas recomendaciones que ayudan a manejar la situación son:

• Evitar el consumo de alcohol en exceso.

• Evitar el uso de palillos de madera.

• No consumir alimentos / bebidas muy frías o demasiado calientes.

• No consumir alimentos ácidos o picantes.

• Reducir el consumo de alimentos con alto contenido de azúcar.

• Usar pasta dental para dientes sensibles.

Otros procedimientos terapéuticos a los que puede acudir el odontólogo son:

• Aplicar fluoruro en las zonas sensibles para fortalecer el esmalte dental.

• Aplicar resina adhesiva en las raíces (zonas radiculares) sensibles.

• Si se ha perdido tejido gingival, se puede optar por el injerto de encía, un procedimiento quirúrgico que requiere mayor manejo.

• En el caso de dientes con bastante sensibilidad que no se ha controlado con otros tratamientos, la opción es un tratamiento de conducto radicular.

Consulte al odontólogo oportunamente

El cuidado del esmalte y la dentina es fundamental para conservar una buena condición de salud oral. Si se presenta algún indicio de sensibilidad dental, se recomienda consultar con el odontólogo lo más pronto para aplicar el tratamiento correspondiente y evitar que la afección impacte partes internas del diente con efectos de mayor complejidad.

Practicar los hábitos de higiene oral en combinación con las visitas regulares al odontólogo son una estrategia de prevención que permite el diagnóstico y atención requerida en tiempo oportuno.