Aftas Bucales: Causas y 5 Formas De Prevenirlas

Las aftas bucales son lesiones tipo úlceras que aparecen dentro de la boca, específicamente en las zonas blandas, como, por ejemplo, las mejillas, la lengua, las encías y la parte interna de los labios; suelen ser bastante molestas y dolorosas, pero no son contagiosas y se curan por sí solas al cabo de una o dos semanas.

En el presente artículo se explicarán las Causas De Las Aftas, síntomas, cómo se diagnostican, qué cuidados se deben tener y si es posible prevenirlas.

Signos y síntomas de las aftas

¿Cómo se ve un afta?

Se presentan inicialmente como lesiones de color rojizo; luego adquieren un color blanquecino o amarillento en el centro, rodeado con bordes rojos y brillantes. Cuando están sanando, en el centro se ven de color grisáceo.

¿Cuáles son los síntomas?

Uno o dos días antes de que se forme un afta se puede presentar una sensación de hormigueo o ardor en la zona donde aparecerá. Son dolorosas y en algunos casos pueden producir fiebre y malestar general.

Clasificación

Las aftas se dividen en 3 tipos:

● Menores: Son las más frecuentes; representan el 80% de los casos. Se observan como lesiones pequeñas que miden de 2 a 5mm. Se curan en una o dos semanas y no dejan cicatrices.

● Mayores: Lesiones grandes y profundas, muy dolorosas, que miden alrededor de 1 cm. Se demoran hasta 6 semanas para curarse y es posible que dejen cicatrices.

● Herpetiformes (Estomatitis aftosa recurrente): Son poco comunes; se observan como lesiones muy pequeñas que miden entre 1 y 2 mm, que se agrupan y forman una úlcera grande. Se curan en una o dos semanas sin dejar cicatrices.

10 Posibles Causas de las Aftas

Las principales causas de las aftas son desconocidas, pero hay varios factores que pueden ser desencadenantes de este tipo de lesiones, como, por ejemplo:

1. Trauma: Lastimarse durante el cepillado, utilizar Brackets o aparatos que causen roce en los tejidos blandos de la boca, mordiscos involuntarios, entre otros.

2. Sensibilidad a algunos alimentos: Chocolate, maní, queso, tomate, cereales, entre otros.

3. Alteración del sistema inmune: Alergias.

4. Alteraciones psicológicas: Estrés emocional, depresión, ansiedad, entre otros.

5. Reacciones adversas a medicamentos: corticosteroides, inmunosupresores, antineoplásicos, antiinflamatorios no esteroideos, antiinfecciosos.

6. Alteraciones hormonales: Durante el ciclo menstrual, el embarazo o la menopausia.

7. Hábitos: Consumo de tabaco.

8. Carencias nutricionales: Déficit de vitaminas y minerales. Por ejemplo, hierro, vitamina C, zinc, ácido fólico, vitamina V12, entre otros.

9. Factores hereditarios.

10. Enfermedades: Por ejemplo, VIH, enfermedad de Behcet, trastornos intestinales inflamatorios y Enfermedad Celiaca.

Un afta puede ser multifactorial, es decir, aparecer por una combinación de varias causas de las aftas.

Diagnóstico Para un Buen Tratamiento de las Aftas

Es necesario realizar un adecuado diagnóstico para determinar el tratamiento de las aftas más efectivo en cada caso.

Inicialmente el dentista hará una historia clínica en la cual indaga sobre los antecedentes familiares y personales, los hábitos, las enfermedades sistémicas, los tratamientos médicos y farmacológicos de cada paciente. También es probable que haga preguntas acerca de, hace cuanto presenta esas úlceras, si las ha tenido antes, si tiene lesiones similares en otras partes del cuerpo, entre otras.

Luego durante un examen clínico el dentista evaluará cómo se ven las lesiones, el tamaño, la forma, el color y donde están ubicadas. Esto se realiza con el fin de determinar qué tipo de lesiones son y hacer un diagnóstico diferencial con otras enfermedades como, por ejemplo, el Herpes virus simple, conocido como calenturas labiales.

Herpes virus simple: Es una enfermedad causada por el virus del herpes tipo I, generalmente se presenta como un grupo de pequeñas ampollas rellenas de líquido; se presentan por fuera de la boca a nivel de los labios, y son contagiosas.

Prevención

Las aftas son recurrentes, es decir, pueden reaparecer; pero es posible disminuir la frecuencia con que se manifiestan siguiendo estas recomendaciones:

● Buenos hábitos de higiene oral: Utilizar cepillo dental de cerdas suaves, lavarse los dientes después de cada comida, utilizar seda dental al menos una vez al día; y evitar enjuagues bucales que contengan alcohol, ya que la llaga puede empeorar.

● Ingerir alimentos saludables: Tener una dieta variada e ingerir frutas, verduras y alimentos ricos en vitamina C y Omega 3.

● Reducir el estrés: aprender técnicas para disminuir el estrés y la ansiedad, puede ser a través de realizar deporte o ejercicios de meditación.

● Proteger la boca: En caso de utilizar Brackets o algún aparato en boca, colocarse cera, o preguntarle al dentista si es posible disminuir el roce del aparato para que no cause daño.

● Prestar atención a la comida: Evitar consumir alimentos irritantes, muy salados o calientes y aquellos a los que presente alergias.

● Masticar lentamente.

Cuándo Visitar Al Dentista

Las aftas bucales normalmente no representan un riesgo para la salud general de una persona; pero en algunos casos es recomendable visitar al dentista, por ejemplo:

● Si presenta desalojo o fractura de alguna restauración y cuando se rompe o se daña una prótesis, para que el dentista pueda darle solución antes que aparezca una lesión.

● Lesiones inusualmente grandes.

● Lesiones muy recurrentes, que aparecen más de 2 o 3 veces al año.

● Aftas que permanecen por más de 2 semanas.

● Aftas que se extienden hacia los labios, es decir lesiones por dentro y por fuera de la boca.

● Dolor intenso.

● Dificultad para comer, beber o cepillarse los dientes.

● Fiebre, diarrea o dolor de cabeza.

Tratamiento de las Aftas Bucales

Normalmente las aftas desaparecen por sí solas al cabo de 2 o 3 semanas; Se pueden seguir recomendaciones en casa, como, por ejemplo, utilizar enjuagues o geles; y en algunos casos aplicar medicamentos de uso tópico o ingerirlos vía oral.

En el blog Tratamiento de las aftas bucales, se presenta este tema a profundidad y se explican las diferentes opciones de tratamiento y recomendaciones en caso de presentar aftas bucales.

Conclusión

Las aftas bucales, aunque dolorosas y molestas, no son contagiosas y suelen curarse solas en una o dos semanas. Estas úlceras aparecen principalmente en las zonas blandas de la boca, como mejillas, lengua, encías y labios. Aunque las causas de las aftas son desconocidas, varios factores como el trauma, la sensibilidad alimentaria, alteraciones inmunológicas, estrés, medicamentos y carencias nutricionales pueden contribuir a su aparición.

Es esencial llevar un buen diagnóstico para diferenciarlas de otras enfermedades, como el herpes simple. La prevención incluye mantener una higiene oral adecuada, reducir el estrés, evitar alimentos irritantes y proteger la boca de aparatos que puedan causar rozaduras. Si las lesiones son inusualmente grandes, recurrentes o causan dolor intenso, es recomendable consultar al dentista para un tratamiento de las aftas adecuado.