Last Updated on: 27th noviembre 2024, 10:17 am
Despertar y tener un sabor salado en la boca es una experiencia que muchas personas han vivido y que es poco agradable para empezar el día. En otras ocasiones, el sabor es metálico y también genera molestía.
El sabor salado en la boca o metálico está vinculado con distintas condiciones de salud que provocan esa molesta sensación.
¿Porque tengo sabor salado en la boca? 6 razones por las que se puede presentar
1. La boca seca
La xerostomía también es un síntoma de varias condiciones de salud, entre ellas
● Diabetes mellitus
● Derrame cerebral
● Enfermedad de Alzheimer
● VIH o SIDA
● Deshidratación
Con el pasar de los años, la boca seca es más frecuente. En otras palabras, es una consecuencia normal del envejecimiento.
Además, la boca seca por largos periodos aumenta la posibilidad de caries. El mal aliento, dolor de garganta, sensación de boca pegajosa, saliva espesa, ronquera y lengua partida (acanalada) son algunos de los síntomas vinculados a la xerostomía.
Se recomienda no consumir alimentos picantes o salados mientras la situación persista.
2. Deshidratación
La deshidratación afecta la calidad de la saliva. Entonces, se produce un desequilibrio en los niveles de sal y agua en su cuerpo. Esto hace que la saliva sea rica en minerales salados.
Los síntomas de deshidratación que pueden presentarse con un sabor extraño incluyen:
a. Fatiga
b. Confusión
c. Mareos o aturdimiento
d. Orina de color amarillo oscuro o naranja
e. Micción infrecuente
f. Sed extrema
3. El goteo postnasal
Ese goteo también puede afectar el gusto y el olfato. Algunos de los síntomas del goteo postnasal incluyen:
● Sensación de mucosidad que drena hacia la garganta
● Necesidad de tragar mucho
● Ronquido o carraspeo al hablar
● Dolor de garganta
● Sensación de tener un nudo en la garganta
4. La enfermedad de reflujo gastroesofágico (ERGE)
Gran parte de las personas con ERGE también tienen acidez estomacal, tos crónica o sienten que algo se les ha quedado atascado en la garganta.
Los medicamentos que neutralizan los ácidos estomacales o reducen su producción, alivian el malestar.
No tratar el reflujo gastroesofágico puede tener efectos posteriores en el esófago y derivar en otros problemas de salud.
5. El sangrado oral
El sangrado también puede ser un síntoma de candidiasis bucal, infección que produce ardor y se observan placas blancas en la boca y, en algunos casos, sabor salado.
Si las encías sangran después del cepillado o con el uso de la seda dental, es señal de una posible gingivitis, lo cual puede causar inflamación de las encías y dolor, condición que lleva a la enfermedad periodontal.
Frente a un sangrado oral persistente por la práctica de la higiene oral, la recomendación es consultar con el odontólogo.
6. Infecciones respiratorias, de oído o dental
Se da como consecuencia de la proximidad que existe entre estos, ya que, el pus o líquido producido por una infección, originada del crecimiento bacteriano y deterioro de las células, podría producir un sabor salado, algunas veces amargo en la boca.
Algunas condiciones de salud menos comunes que pueden presentar sabor salado en la boca
1. En el embarazo, los cambios hormonales pueden causar inflamación de la naríz que se conoce como rinitis del embarazo y produce secreción nasal, goteo posnasal y en algunas ocasiones un sabor salado. Esta es una condición inofensiva que desaparece algunas semanas después de terminar el periodo de gestación.
Durante el embarazo, la molestía del sabor salado se puede manejar con el uso de aerosoles nasales de solución salina.
2. Las enfermedades autoinmunes hacen que el cuerpo ataque las glándulas humectantes, incluidos los conductos lagrimales y las glándulas salivales. El lupus y la artritis reumatoidea son condiciones de salud que presentan mayor riesgo de contraer el síndrome de sjögren, que afecta las glándulas salivales y provoca resequedad en la boca, así como disgeusia, percepción de un mal sabor continuo en la boca que puede ser salado, rancio o metálico.
Si se experimenta sequedad en la boca y se tiene un diagnóstico de alguna enfermedad autoinmune, se debe consultar con el médico tratante, quien prescribirá medicamentos más apropiados.
3. Efectos secundarios de algunos medicamentos pueden causar resequedad en la boca como efecto secundario, provocando el sabor salado o metálico. Los medicamentos que pueden tener ese efecto secundario son los analgésicos, antibióticos, antidepresivos, antihistamínicos, los diuréticos, la quimioterapia y los sedantes utilizados para la ansiedad o trastornos del sueño.
4. Deficiencia nutricional -que se puede desarrollar en corto tiempo o durante varios años- también produce un sabor salado o metálico en la boca. En este caso, se debe consultar con un médico o nutricionista para identificar cuáles son los nutrientes o vitaminas que registran deficiencia y seguir las recomendaciones del profesional.
Las personas que viven con insuficiencia renal, en la etapa terminal manifiestan con frecuencia la sensación de un sabor metálico en la boca, el cual puede ser consecuencia de un alto nivel de urea en el cuerpo, bajos niveles de zinc, cambios en el metabolismo, el consumo de los medicamentos prescritos en su tratamiento, menor número de papilas gustativas, cambios en el flujo y composición de la saliva.
¿Cómo puedo darle manejo en casa?
● Beber bastante agua. La recomendación médica es beber entre 6 y 8 vasos de agua diariamente para mantenerse hidratado.
● Asumir una higiene bucal adecuada con cepillado frecuente y uso regular de la seda dental.
● Usar un enjuague bucal antibacteriano.
● Masticar chicle sin azúcar.
● Reducir el consumo de alcohol y tabaco.
● Evitar alimentos grasoso o picantes.
Es importante que las personas con afección cardiaca o renal limiten el consumo de líquido debido a los medicamentos diuréticos que requieren en sus tratamientos.
¿Cuándo hablar con el médico por un sabor salado en la boca?
Se recomienda consultar con el médico tratante, en los siguientes casos:
● Cambios de voz o ronquera
● Abultamiento en el cuello
● Inflamación de las glándulas salivales cerca a la oreja o debajo de la mandíbula.
● Dificultad para masticar o comer.
● En casos de diagnóstico de diabetes, enfermedad cardiaca, enfermedad renal o condición autoinmune.
Se recomienda tener en cuenta que, aunque el sabor salado o metálico en la boca no es una situación de cuidado especial, si el malestar persiste se debe consultar con un profesional de la salud, en especial cuando se tiene un diagnóstico de afección cardiaca, diabetes, deficiencia renal o alguna enfermedad autoinmune.
Si se presenta sangrado oral provocado por el cepillado y el uso de la seda dental, y éste no se reduce, se debe consultar la situación con el odontólogo y prevenir una posible enfermedad periodontal, facilitando una mejor salud oral y bienestar integral.
Conclusion
Experimentar un sabor salado o metálico en la boca puede ser un indicativo de diversas condiciones de salud, desde la deshidratación hasta enfermedades más serias. Es importante no ignorar este síntoma, pues podría ser la señal que nuestro cuerpo envía para alertarnos de un desbalance o problema subyacente.
La clave está en la prevención y en la acción temprana: mantener una buena higiene bucal y una adecuada hidratación puede ser suficiente para resolver el problema en muchos casos. Sin embargo, si el síntoma persiste o se acompaña de otros signos, consultar a un médico es esencial para descartar condiciones de mayor cuidado y recibir el tratamiento adecuado.
Este pequeño pero significativo síntoma es un recordatorio de la importancia de escuchar a nuestro cuerpo y actuar en pro de nuestra salud y bienestar.
Preguntas frecuentes
¿Qué puede causar un sabor salado en la boca?
Puede deberse a la boca seca, deshidratación, cambios hormonales, enfermedades autoinmunes, deficiencias nutricionales, ciertos medicamentos, ERGE, sangrados orales, infecciones, o insuficiencia renal.
¿Por qué el embarazo puede provocar un sabor salado en la boca?
Durante el embarazo, los cambios hormonales pueden causar inflamación nasal conocida como rinitis del embarazo, la cual puede producir un goteo posnasal y en algunos casos un sabor salado. Este es un fenómeno temporal que generalmente desaparece después del embarazo.
¿Cómo se relacionan las enfermedades autoinmunes con el sabor salado en la boca?
Las enfermedades autoinmunes pueden hacer que el cuerpo ataque sus propias glándulas humectantes, incluyendo los conductos lagrimales y las glándulas salivales. Esto puede llevar al síndrome de Sjögren, que afecta las glándulas salivales y provoca resequedad en la boca y disgeusia, es decir, una percepción continua de mal sabor que puede ser salado o metálico.
¿Qué recomendaciones existen para manejar en casa el sabor salado en la boca?
Algunas sugerencias para el manejo casero incluyen mantenerse bien hidratado, asumir una higiene bucal adecuada, usar enjuague bucal antibacteriano, masticar chicle sin azúcar, reducir el consumo de alcohol y tabaco, y evitar alimentos grasosos o picantes.
¿Cuándo es recomendable consultar a un médico por un sabor salado en la boca?
Se recomienda consultar a un médico si se presenta ronquera, abultamiento en el cuello, inflamación de las glándulas salivales, dificultad para masticar o comer, o si ya se tiene un diagnóstico de diabetes, enfermedad cardiaca, enfermedad renal, o alguna condición autoinmune.
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Referencias
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