Ibuprofeno y Salud Oral: 8 Efectos Secundarios

El dolor dental es uno de los mas intensos que existen, es el principal motivo por el cuál mil de personas asisten al dentista cada año. Las causas del dolor de dientes son variadas: infección, fractura, una restauración desadaptada, caries, apretamiento dental (bruxismo), entre otros.

Muchos pacientes se automedican para controlar el dolor dental mientras logran asistir a un servicio odontológico, algunos de estos medicamentos son los AINEs (Antiinflamatorios no esteroideos) como el Ibuprofeno; pero ¿es el ibuprofeno seguro para aliviar el dolor de dientes?

Obtenga información sobre el uso de ibuprofeno para la salud bucal, como puede aliviar el dolor y reducir la inflamación, y como minimizar los riesgos potenciales.

¿Cómo actúa el ibuprofeno?

Los AINEs son medicamentos que tienen propiedades antiinflamatorias, analgésicas y antipiréticas, es decir, alivian la inflamación, el dolor y la fiebre; los más comunes para controlar el dolor dental son la aspirina, el naproxeno, el ibuprofeno, el diclofenaco y el celecoxib.

La función de los AINEs es bloquear o detener la producción de ciertas sustancias químicas (prostaglandinas) en el cuerpo, estas son las causantes de la inflamación, el dolor y la fiebre. Su mayor eficacia se produce en dolores generados por un proceso inflamatorio.

Si quieres conocer consejos curativos naturales para el dolor dental, consulta nuestra completa guía sobre aceites esenciales para el dolor de muelas que te ayudará a aliviar las molestias incluso en casa.

En odontología los AINEs, como el ibuprofeno, se utilizan para:

● Aliviar el dolor y la inflamación después de un procedimiento dental o quirúrgico.
● Disminuir o calmar el dolor y la inflamación dental causadas por una infección.

Existe una gran variedad de medicamentos de venta libre con nombres comerciales diversos que contienen AINEs, por eso al comprar un medicamento para el dolor es importante fijarse en la etiqueta para conocer sus componentes.

¿Cómo afecta el ibuprofeno a la salud oral?

En odontología el dolor tiene causas variadas, siendo las más comunes la caries dental, la enfermedad de las encías, las infecciones, los abscesos y la inflamación del nervio o la pulpa dental (pulpitis).

Los AINEs en general, incluido el ibuprofeno funcionan bien para aliviar el dolor de origen dental (odontogénico), pero no eliminan la causa del dolor; es decir, su uso es temporal, mientras el paciente logra asistir a un servicio odontológico y es chequeado por un dentista, quien le explicará el origen de su dolor, y el tratamiento indicado para evitar que el problema avance y se presenten complicaciones.

¿Es seguro utilizar ibuprofeno?

Si, es seguro utilizarlo en dosis bajas y por periodos cortos de tiempo, siempre y cuando tenga una prescripción médica; ya que el uso descontrolado de este y otros AINEs puede causar afectaciones graves en ciertos pacientes, como aquellos que están coagulados, mujeres en embarazo y personas alérgicas a los AINEs.

También es probable que se presenten algunos efectos secundarios durante su uso, como, por ejemplo:

● Dolor de estómago
● Estreñimiento
● Diarrea
● Gases
● Acidez estomacal
● Náuseas
● Vómito
● Mareos

En la medida de lo posible, se recomienda no ingerir ningún medicamento sin receta médica por las siguientes razones:

● Los efectos del medicamento pueden variar según la condición del paciente: edad, enfermedades sistémicas, embarazo y uso de otros medicamentos pueden afectar la seguridad del paciente.

● La falta de conocimiento: Generalmente un paciente no es consciente de la dosis, la frecuencia de administración y la duración del tratamiento, y ese desconocimiento puede generar efectos adversos graves.

● A través del dolor, el cuerpo avisa que algo no está bien: Cuando se toma un medicamento para el dolor, pero no se trata la causa, se pueden esconder y pasar por alto enfermedades que probablemente avancen y se compliquen si no son detectadas a tiempo.

¿Cuándo no es seguro utilizar ibuprofeno?

Normalmente los AINEs son seguros para pacientes sanos; pero no deben ser utilizados en pacientes que presenten las siguientes condiciones:

● Alergia al contenido del medicamento
● Gastritis o antecedentes de úlcera o sangrado gástrico.
● Mujeres en embarazado, especialmente en el segundo y tercer trimestre de gestación.
● Hipertensión o quienes hayan sufrido un infarto hace menos de 6 meses.
● Quienes toman medicamentos anticoagulantes o tienen trastornos de la coagulación.

Algunas recomendaciones para tener en cuenta respecto al uso de AINEs, como el ibuprofeno son:

● No se recomienda administrar aspirina en niños, se ha demostrado que puede causar daño hepático y cerebral severo.

● Nunca consumir dosis superiores a las prescritas por el profesional de la salud ya que, en lugar de aumentar su eficacia, aumenta el riesgo de presentar efectos secundarios.

● En algunos casos combinar Ibuprofeno con otros medicamentos como el paracetamol (Tylenol, acetaminofén) puede ser seguro, pero si se excede la dosis recomendada esta combinación puede aumentar el riesgo de toxicidad y efectos secundarios graves, como insuficiencia renal, dolor epigástrico, insuficiencia cardiaca y mayor riesgo de sangrado y hemorragias digestivas.

● Si está tomando AINEs y experimentan dolor en el pecho, falta de aire o dificultad para respirar, debilidad en una parte o en un lado del cuerpo o dificultad repentina para hablar, suspenda el medicamento y busque ayuda profesional inmediata.

● No use AINEs para el dolor relacionado con el tratamiento de ortodoncia, ya que este puede detener el movimiento de los dientes. En caso de dolor fuerte, tomar paracetamol.

¿Por qué asistir al dentista?

El ibuprofeno puede ser utilizado de manera temporal para aliviar la molestia en el momento, pero el paciente debe buscar atención odontológica lo más pronto posible.

Seguramente después de tomar Ibuprofeno sienta mejoría a la molestia o al dolor dental; pero no tratar el origen del dolor, puede hacer que los problemas dentales avancen, y a futuro no solo perder dientes o generar infecciones dentales, sino comprometer la vida del paciente.

Se recomienda asistir al dentista para chequeos periódicos al menos cada 6 meses, o en caso de presentar dolor, asistir inmediatamente, ya que en etapas iniciales la mayoría de las enfermedades dentales suelen ser fáciles de solucionar, pero entre más avance la enfermedad, más complicado será tratarla.

Conclusión

Hay que aprender a reconocer las señales que da el cuerpo, en el caso del dolor dental, entender que algo en la boca no está bien y debe ser revisado por un profesional; automedicarse, aunque puede mejorar las molestias, no es la solución más efectiva, ni la más segura, se debe eliminar la causa del dolor; ya que cualquier enfermedad bucodental puede avanzar, agravarse y ser más difícil de tratar en el futuro.